Gestos y Posturas en la Misa
- Usar ropa adecuada en la iglesia. Evitemos trajes o pantalones cortos, trajes escotados o demasiado ceñidos, etc.
- Al entrar a la iglesia, salude al Señor presente en el sagrario haciendo una genuflexión.
- Al comenzar el cántico de entrada, póngase de pie para iniciar la celebración. Cuando comiencen las lecturas se puede sentar para escuchar con atención la Palabra.
- Al entonar la aclamación al Evangelio o cuando se va a leer el mismo póngase de pie. Antes del Evangelio decimos: “Gloria a Ti, Señor”, mientras que después del mismo decimos “Gloria a Ti, Señor Jesús”. Durante la homilía se permanezca sentado, prestando atención.
- Durante la profesión de fe (Credo) y/o la oración de los fieles, póngase de pie, expresando así la firmeza en la fe y atención a la oración que se eleva a Dios. Recuerde hacer una hacer una reverencia profunda al hacer referencia al Misterio de la Encarnación durante el Credo.
- Durante la preparación de los dones permanezca sentado, ofreciendo en su corazón su vida y obras al Señor.
- A la invitación “Orad hermanos...”, antes de la oración sobre las ofrendas, póngase de pie para elevar una oración al Señor, a través del sacerdote, pidiéndole que acepte esos dones.
- Permanezca de pie hasta que el sacerdote impone las manos sobre las ofrendas para invocar la fuerza del Espíritu (epíclesis) para que sean transformadas, entonces nos arrodillamos, hasta que se hace la aclamación después de la consagración.
- Permanezca de rodillas durante la consagración, hasta la aclamación a “Este es el sacramento de nuestra fe” u otra aclamación, la cual se dice o se canta de pie. Si no puede arrodillarse y su condición se lo permite, permanezca de pie y haga una inclinación profunda mientras el sacerdote hace la genuflexión durante la consagración.
- Durante el rito de paz, se saluda sólo a los más cercanos, diciendo: “La paz sea contigo”. Y el que la recibe responde: “Amén”.
- Permanezca de pie hasta el momento de la comunión, después de la cual se arrodillará o sentará o mantendrá en pie. Al recibir la comunión debe hacer una reverencia con la cabeza o con el cuerpo, incluso una genuflexión antes de comulgar o comulgando de rodillas. Quienes reciben la comunión en la mano deben poner la mano izquierda sobre la derecha para recibirla y comulgar inmediatamente moviéndose hacia un lado, dejando que pase el siguiente y mirando hacia el altar, todo ello después de hacer la reverencia previa. No olvide responder: “Amén”, cuando el ministro dice: “Cuerpo de Cristo”.
- Ante la invitación a orar del sacerdote, todos se ponen de pie para la oración final y la bendición, que si es solemne se debe recibir inclinándose un poco.